En un contexto en el que el futuro se muestra dudoso, crear y publicar un concepto puede ser una carrera de óbices. Esto es especialmente cierto si se trata de una firma relacionada con el sector de la gestión de activos y la inversión. Herrero Brigantina nació hace 12 años, una empresa de servicios financieros que surgió en los comienzos del estallido de la burbuja inmobiliaria. Su Presidente del Consejo Asesor, Juan González Herrero, enseña que la compañía llevaba tiempo fraguándose intelectualmente y que fue que se requiere para dar una contestación nueva y adaptada a los nuevos tiempos.
Aventurarse en épocas turbulentas es difícil y, como bien enseña González Herrero, el primordial obstáculo fue haber nativo de una crisis profunda y severa que ha transformado todo. Esto no fue lo único, ya que también hubo adversidades con la burocracia y difusión de una idea nueva. Esta última fue primordial a fin de que el negocio creciese rápidamente, resultando en una base de 35000 clientes en toda Europa. La meta en este momento es llegar a los cien. 000 en los próximos 6-7 años.
La clave del éxito de Herrero Brigantina ha sido su filosofía simple : Escuchar de verdad al cliente, ofertar aquellas soluciones que el cliente necesite, cuándo y de qué manera lo precisa, y meditar siempre y en todo momento en su confort y sus intereses. No obstante, el contexto de hoy invita a la contención y la prudencia. De ahí que, González Herrero sugiere tranquilidad y sangre fría para reducir las pérdidas. Además de esto, recomienda invertir en activos de renta variable unidos a compañías que fabrican cosas que la multitud, y los Gobiernos, precisan. Esto puede ser una fuente de potencial ganancia a corto plazo.